La inspectora Angelika debe encontrar las claves de un crimen mientras lidia con los problemas domésticos y con su ex

Ha aparecido el cadáver de una chica en una tumba del cementerio de Viena. Lo han descubierto los sepultureros cuando hacían una labor de mantenimiento. Hasta allí se ha desplazado Angelika Schnell, la responsable del departamento de investigación criminal de la ciudad acompañada por su compañero Harald Franitschek. Se trata de un crimen bastante macabro, pues parece que el cuerpo lleva allí una larga temporada. Al menos eso es lo que asegura Stephan Schnell, forense y exmarido de Angelika.

Mientras se produce la investigación, Angelika también tiene que lidiar con los problemas domésticos en casa. parece ser que la mascota de los niños se ha perdido, detalle que no se le escapa a Stephen que aprovecha para soltarle una pulla a su exmujer.