Los padres de los chicos culpan a Alfredo de lo sucedido y le piden explicaciones. Pese a los apoyos que recibe por parte de sus compañeros, Alfredo se plantea seriamente dejar la enseñanza. Blas, el padre de Luismi amenaza con sacarle del Azcona. Sin embargo, el chico, en un arrebato de valentía, le planta cara y se niega en rotundo. Quimi y César alaban la osadía de su amigo.